10 trucos sencillos para tener tu casa siempre limpia y ordenada

Isabel Rodríguez Isabel Rodríguez
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Tener una casa lleva implícita la responsabilidad de mantener cierto orden en su interior. El motivo es tan sencillo como que, los espacios en los que cada cosa está en su lugar, se perciben como limpios y acogedores mientras que, el desorden supone todo lo contrario. No se trata de no limpiar, nada más lejos de la realidad. Se trata de contribuir a generar un aspecto perfecto antes incluso de haber realizado las tareas domésticas diarias o semanales. 

Interiorizar ciertos hábitos puede ayudarte en tu cometido evitando así que el caos traslade la sensación de que tu hogar no se ha limpiado en años. Por eso, en este libro de ideas, te proponemos 10 trucos sencillos para tener tu casa siempre ordenada y, además, parezca impoluta. ¿Has cogido papel y lápiz?

1. Ojo con las esquinas

¿No te ha ocurrido alguna vez que terminas de pasar la aspiradora y descubres que la suciedad persiste en los rincones y esquinas? Las zonas de difícil acceso constituyen todo un reto para la limpieza y el orden en el hogar pero, incluso, las áreas más complicadas pueden salvarse con un poco de ingenio. La solución es encontrar dispositivos adaptados a su distribución pero, cuando no los hay, puedes adaptar tus recursos con algo de creatividad. Un rollo de cartón (sirven los del papel de cocina o, incluso los del papel higiénico) puede ayudarte a crear un cabezal apropiado para llegar a los lugares más recónditos. 

2. Limpia las persianas

La falta de tiempo o el cansancio acumulado durante la semana son dos de los factores principales que pueden llevarte a limitar los esfuerzos a la hora de limpiar tu casa. Sin embargo, es importante que completes las tareas de un modo práctico y desde un punto de vista de optimización de tu dedicación. Uno de los puntos que, habitualmente, tendemos a dejar pasar son las persianas que protegen las ventanas y que, no obstante, pueden transformar la estancia más ordenada en un espacio que se perciba sucio o desatendido. 

Para eliminar el polvo que se acumula en las lamas bastará con que pases un trapo sobre ellas, incluso, un guante viejo o un calcetín puede ayudarte a tener que invertir menos tiempo en la tarea y recuerda que, cuanto menor sea la frecuencia con la que realices esta limpieza, menor será la suciedad que encuentres. 

3. El interior de la nevera

Hay espacios que, por su naturaleza o uso, tienden a ser susceptibles de mayores amenazas a efectos de suciedad. La cocina y todos los elementos que forman parte de su decoración son un claro ejemplo de ello. Uno de los aparatos más utilizados y, en consecuencia, más propenso a sufrir accidentes que deterioren su imagen es el frigorífico. Un buen truco para mantenerlo limpio y ordenado es que forres sus bandejas interiores con plástico transparente de modo que, si en algún momento se derraman líquidos o cualquier otro tipo de sustancia, sólo tendrás que renovar el plástico para que vuelva a lucir impoluto. 

4. Las cortinas

Otro de los trucos para tener tu casa limpia y ordenada tiene que ver con los textiles. Pese a que, en ciertas estancias, su papel puede parecer que pasa desapercibido, lo cierto es que la aportación estética de las cortinas ocupa un lugar destacado. Además de ser, en muchos casos, garantes de la intimidad, constituyen un recurso decorativo con un potencial increíble. Por eso, dentro de las tareas que has de acometer para salvaguardar la belleza de tus interiores, no olvides lavar con regularidad las telas que protegen tus ventanas. 

5. Elige bien el jabón

Seguro que has oído en multitud de ocasiones las bondades de emplear jabón natural en forma de pastillas para la higiene personal. Sin cuestionar su efectividad, lo cierto es que, optar por su versión líquida o, incluso, pasarse al tradicional gel de baño, es otro de los trucos para mantener tu casa limpia. En la práctica, la recomendación tiene que ver con la suciedad que produce el uso de los jabones tradicionales que, en líneas generales, contienen más grasas y aceites que hacen que sus restos sean más difíciles de eliminar. 

6. Limpia tus armarios y cajones

Las soluciones de almacenamiento, ya sea en la cocina, el baño, el dormitorio o cualquier otra estancia de la casa, son grandes aliadas a la hora de mantener el orden en el hogar. Sin embargo, no basta con almacenar en ella los objetos o recursos de uso cotidiano o menos frecuente sino que, además, hay que mantener estos espacios limpios. Procura que cajones y armarios estén ubicados en lugares de fácil acceso y tengan un diseño funcional que te permita ponerlos a punto sin demasiadas dificultades.

7. Útiles, siempre a mano

Hay objetos y accesorios diseñados con el fin de hacernos la vida más fácil y que, además, son un recurso perfecto para mantener la casa ordenada y limpia. En la cocina no faltan ejemplos de este tipo de piezas. Uno de los más populares son los soportes para los cuchillos, un elemento que, además de contribuir a una organización perfecta de un espacio que, por otro lado, ha de gozar siempre de este ordenamiento, puede añadir encanto a la decoración.

8. No acumules menaje para lavar

Es una práctica tan extendida como poco recomendable y es que, ya lo dice el saber popular: no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Acumular platos, vasos, sartenes y otros útiles en el fregadero pendientes de lavar no es sino el principio del caos, lo mismo que dejarlos sin colocar una vez limpios. Procura no hacer acopio de enseres y, siempre que termines, lleva la organización hasta el final guardando cada cosa en su lugar. Sólo así conseguirás que tu casa esté limpia y ordenada. 

9. El dormitorio de los niños

Cualquiera que haya tenido contacto con niños sabe que, los pequeños repiten, en no pocas ocasiones, patrones y comportamientos de los adultos. Tal es la dinámica que resulta imprescindible hacer que, desde la más tierna infancia, tus retoños entiendan la importancia de mantener la casa limpia y ordenada. No se trata de adoctrinarles escoba en mano, sino más bien, de crear hábitos que les permitan tener las cosas organizadas de un modo sencillo para que, en el futuro, sean responsables con la buena armonía del hogar. Colocar soluciones de almacenamiento en la habitación de los niños es un buen punto de partida.

10. Mucho más que poner la lavadora

Una de las tareas domésticas que más puede trastocar la organización del hogar es la colada. Un truco para mantener tu casa ordenada atendiendo a esta labor es elegir los elementos apropiados para hacer de ella un camino de rosas o, lo que es lo mismo, atacar cada fase con sentido práctico. Disponer de un cuarto de lavado es perfecto para garantizar la organización pero, en cualquier caso, no está de más contar con un cesto para la ropa sucia, un espacio para guardar la plancha y los armarios, cajones y estantes necesarios para organizarla una vez hayas terminado de lavar, secar y planchar tus prendas. 

¿Te gustaría diseñar el cuarto de lavado perfecto? Aquí te contamos cómo hacerlo: 12 ideas fantásticas para tener el cuarto de lavado perfecto.

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