No hay nada mejor que una bonita piscina para refrescarse en los días de calor. Hay muchos tipos, y formas geométricas, con mayor o menor profundidad. El proyecto que hoy vemos, se llevado a cabo por el equipo de expertos de la empresa Atádega Construcciones, que ofrece un servicio de reformas y construcción civil, hasta pintura interior y exterior, y una total especialización en la construcción de piscinas personalizadas en hormigón, con dimensiones, geometría y acabados requeridos por el cliente, adecuando la piscina al espacio existente en el exterior de la vivienda.
Una vez ejecutada la excavación de las tierras de la piscina, se echa un hormigón de limpieza en la base de la losa de cimentación y se construyen los muros perimetrales de ladrillo, que hacen de encofrado del hormigón. Por último, se coloca un mallazo de acero en la cara inferior de la losa y los muros para armar el hormigón.
Antes de hormigonar la losa de cimentación se ha colocado un mallazo de acero en la cara superior de la misma, y en la cara interior de los muros. De tal forma que losa y muros tienen un armado de doble mallazo. Este el momento de comenzar a rellenar de hormigón toda la superficie de la losa de cimentación.
Cuando fragua el hormigón de la losa de cimentación, se encofran con madera los muros perimetrales y se rellenan con hormigón. Para que la piscina sea totalmente estanca, y no se filtre agua a través de la losa y los muros, hay que impermeabilizar con pintura impermeabilizante, que elimina la posibilidad de filtraciones.
Se coloca el acabado final. En esta ocasión se optó por un alicatado de gresite con varios tonos en color azul, logrando el efecto óptico de agua del mar. En su coronación se remató con una especie de listelo diseñado como un anillo en el perímetro de la piscina, con un dibujo en zigzag blanco, simulando las olas del mar.
Al ser una piscina personalizada cada detalle cuenta, por eso todos los revestimientos dan un excelente acabado a la piscina. Como vemos se optó por colocar piedra natural en la coronación del muro perimetral de la piscina. Es una solución elegante y combina perfectamente con este espacio que es tradicional y rústico.
Vemos también que están revestidas de piedra natural las huellas de los peldaños que suben al nivel de la piscina. Al fondo a la derecha en su borde, vemos un bello y gran cántaro de barro, que compone y añade todo un detalle decorativo. Y crea la ilusión óptica de que de él mana una fuente, que llena la piscina de agua fresca.
La piscina se ha llenado de agua y está lista para darse un buen baño. Es obvio que necesita más trabajo y dedicación el construir una piscina de este tipo, y no es comparable a comprarte una piscina prefabricada y ponerla en el centro del patio. Pero no cabe ninguna duda que vale el sacrificio y llegar a tener este resultado.
Ideas de piscinas: 15 piscinas pequeñas que caben en cualquier patio